Público familiar (niños a partir de 7 años) |
5 de noviembre |
11.30, 13 y 17 h. |
Auditorio |
Precio por persona: 6 euros (tanto niños como adultos) |
25 minutos |
Aunque sabemos que las esperas con peques son a veces complicadas, dadas las circunstancias os recomendamos que lleguéis al centro con suficiente margen de tiempo, entre 15 y 20 minutos antes. En el caso de que lleguéis tarde, podréis acceder sólo durante los 10 primeros minutos de actividad. |
Espectáculo incluido en el VII Festival de Títeres y Objetos ‘Pendientes de un Hilo’, organizado por La Tartana Teatro, del 23 de octubre al 5 de noviembre. Toda la información en festivalpendientesdeunhilo.com
En vísperas del turismo espacial y los transbordadores de bajo coste a la luna, Compagnie Bakélite utilizará todo su ingenio y su capacidad de improvisación para ofrecerte un viaje que sólo unos pocos hombres y mujeres selectos han realizado.
Alan Floc’h logra proezas tecnológicas a partir de materiales reciclados. De la artesanía a hacks, nos hace viajar en el tiempo y el espacio hacia lo desconocido, siguiendo los pasos de los pioneros espaciales.
3… 2… 1… ¡Despegue!
Pero, un momento. ¿Para ir a dónde?
Ficha artística y técnica
Guion, utilería e interpretación: Alan Floc´h
Puesta en escena: Olivier Rannou
Asesoría artística: Gaëtan Émeraud
Efectos: Ewen Toulliou
Apoyo al desarrollo de proyectos: Charlene Faroldi, Louise Gerard y Sandrine
Hernández
Producción: Compagnie Bakélite
Coproducción: Hectores / Festival Á l’abordage, Île d’Aix
Residencia en Théâtre du Cercle (Rennes) y en el festival À l’Abordage (Île d’Aix)
Con el apoyo de la ciudad de Rennes y la región de Bretaña
Compagnie Bakélite
Compagnie Bakélite nació en 2005 en Rennes. Desde entonces, ha permitido a Olivier Rannou encarnar sus inspiraciones artísticas no sólo en los teatros de Francia, sino también en otros lugares fuera de su país de origen. La compañía se ha convertido así, a fuerza de firmar espectáculos memorables donde lo atrozmente divertido se codea con lo rigurosamente loco, en un referente del teatro de objetos en Francia.
Es un arte de meticulosidad y rigor, que juega con la imaginación y los símbolos, con la fuerza evocadora del objeto cotidiano. Recrean, por ejemplo, ejércitos a partir de tres figurillas, meten pueblos enteros en una maleta, montan un banco con una alcancía en forma de cerdo.
Trabajan la precisión en los cortes y en las secuencias, con todo el rigor de una escritura por planos que toma prestada su dramaturgia del cine.
Prestan mucha atención a lo humano y al encuentro: el de la propuesta artística con un público, y el de las personas entre sí. Todos sus espectáculos están diseñados para un público familiar, donde todos, sea cual sea su edad, descubran algo que poder compartir con los demás.
Su objetivo, en definitiva, es hacer sonreír a la gente, para probar el equilibrio entre el placer infantil del juego y la delicadeza. Y estas son, por tanto, las constantes que encontramos en su obra.